Yo siempre quise ser maestra desde niña. Mi padre, aunque no tenía muchos recursos, me ayudó a ir a la Normal más cerca que hubiera. Estudie en una escuela Normalista en Arteaga, Michoacán. Ademas de educarnos, hacíamos lo mismo [que los estudiantes desaparecidos], hacíamos huelgas y nos apoyaron diferentes escuelas Normalistas como la de nosotros y la de Ayotzinapa. Así como esos estudiantes andaban protestando, nosotros así lo hacíamos.
My name is Carolina Arceo. I’m from Planada, California, and I’m 45 years old. I was motivated to attend [the protests in Merced] in support of the 43 missing normalista students when I heard an announcement at my church urging the congregation to attend. Twenty years ago, I too was a normalista like the missing students. Hearing about their disappearance hits home for me because I used to attend protests and rallies like they did.